Cómo llegar a Viena
Las formas más comunes de llegar a Viena son el avión y el tren. Debido a su situación y a su importancia como capital de Austria, Viena es una ciudad que se encuentra perfectamente comunicada con el resto de Europa.
Avión
El número de visitantes españoles que llegan anualmente a Viena aumenta de año en año. Buscando con tiempo, es posible encontrar vuelos desde Barcelona en líneas aéreas de bajo coste por poco más de 60 € (67 US$).
Las íneas aéreas de bajo coste que vuelan a Viena tienen vuelos directos durante el verano casi a diario desde Barcelona y Madrid. Otra opción es volar a Bratislava, a unos 80 km de Viena desde Mallorca, Málaga, Gerona o Alicante.
Para encontrar el mejor precio, podéis utilizar nuestro buscador de vuelos:
Una vez que tengáis el vuelo reservado, lo siguiente es buscar la mejor forma para llegar desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad:
Tren
Aunque para llegar desde España no es un transporte demasiado rápido, el tren es una buena opción para los viajeros que estén recorriendo Europa y viajen desde ciudades como París, Praga, Budapest o Venecia.
Una vez en Viena, el tren es también es la mejor opción para visitar otras ciudades austriacas como Salzburgo o Bratislava.
Si queréis llegar en tren desde España, la mejor opción es llegar hasta París desde Madrid o Barcelona y una vez allí tomar el tren a Viena.
Coche
Para los que les gusta conducir y prefieren viajar por carretera, siempre les queda la opción de viajar en coche. Hay que tener en cuenta que desde Madrid hasta Viena hay prácticamente 2.500 kilómetros, 1.800 desde Barcelona.
Autobús
Llegar desde España hasta Viena en autobús nos parece una opción poco viable, ya que es un transporte más lento que el tren y más caro que el avión.